Después de 15 años de
sedentarismo total, llegados los 30 me he decidido a hacer running, y todo
gracias a mi perra Hanna, a la que operamos este verano. Para evitar que
engorde, y al verme un poco estancado (¡con lo que yo era!), empecé a correr
hace un mes y bueno, desde ese mes solo he entrenado dos semanas, ya que he salido
a correr por montaña y he estado unos días con dolor en los dedos del pie
derecho.
Mi primera cursa fue la
de el Prat y mi objetivo era hacer 55 minutos, y lo bajé en ¡3 minutos! ¡Qué
contento me puse! Ya se que no es un tiempazo, pero para ser un sedentario que
lleva 15 años de vagancia y fumando no está mal.
13 de octubre, 6.00 am. ¡6.00 am! ¡Dios mio, qué
locura, un domingo! Me levanto y me tomo un café con leche bien cargado, toca
la Montnegre Race. Me fumo un cigarro... No desayuno nada porque el fin de
semana, al no hacer ejercicio físico, no me entra nada. Bajo a Castelldefels a
buscar a Will, se sube al coche y vamos de camino a Arenys de Munt entre risas
y conversaciones sin saber lo que nos esperaba. Una hora de viaje y media en
aparcar. Nos preparamos para la salida y, mientras tanto, nos explica el
speaker que la carrera será de unos metros de más, ¿unos metros? ¡Más bien
kilómetros, 3 exactamente! (según Runtastic, 3,5 de más).
9.15 am. Empieza la carrera, y el
primer kilómetro es una leve subida. Tras hacer el primer giro se nos cayó el
alma al suelo al ver la subida, y no paramos de subir: 69 metros el primer
kilómetro, 96 metros el segundo, 146 el tercero, 67 el cuarto, y 91 el quinto.
En las primeras subidas decidí forzarme un poco más y me distancié de Will.
A partir del kilómetro 5
empezó la bajada y noté un pinchazo en un dedo del pie derecho, ya que era muy
pronunciada y la fuerza recaía en los pies. Al tener esa sensación cambié el
tipo de pisada para evitar lesiones. También tuve un flato bastante fuerte,
pero no aminoré la marcha. En el sexto kilómetro hice la primera parada de avituallamiento, tomé un vasito de bebida isotónica (malísima, por cierto), y medio plátano.
A partir de ahí todo fue
subida y bajada. En el kilómetro 10 había un organizador avisando de zona
técnica, que empezó con un salto de medio metro de altura. Desde ese punto
empezó a estrecharse el camino y no cabía apenas dos personas. El suelo era muy
irregular, pero fueron los tres kilómetros más divertidos del circuito. Cuando
faltaba menos de un kilómetro ya escuchaba al speaker y la música. Se me hizo
eterno llegar a meta.
10.36 am. Llegada a meta. Después
de 1:21:23 segundos, allí me esperaba mi mujer con la cámara para hacerme unas
fotos. Fui directamente a recoger los obsequios de la carrera: unas medias
compresivas de la marca Hoko de la edición Montnegre Race 2013, un ticket de
Coca-Cola, un gel y una botifarra con una llesca de pan con tomate. Como ya no
había nada más que hacer allí, nos fuimos a casa.
Una carrera muy dura pero
recomendable. Me lo pasé muy bien y vi que era capaz de mejorar mis tiempos, lo
que me motiva para seguir haciendo cursas. La siguiente es la del Mediterrani
este domingo, y me he propuesto bajar a 50 minutos, ¡a ver si lo consigo!
Carrera: 13km.
Posición: 79 de 171
participantes.
Media por kilómetro: 6'02
minutos.
Sergio
El equipo de sedentarios
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